Chiste de Buen Gusto

Un mago subió a un autobús de ruta que iba llenísimo a la hora pico y quiso entretener a la gente con sus trucos.

¡¡Señoras y señores, ­gritaba - muy buenas tardes!!
Nadie le hacía caso, a pesar que el pobre hombre había sacado de la nada un ramo de flores.
Enfadado porque nadie le hacía caso, les anunció:
Voy a hacer que se eleve este autobús... ¡1, 2, 3!
Y entonces el microbús se elevó.
Toda la gente, asustada, le gritaba:
¡¡¡Bájalo, bájalo, por favor!!!
Ahhhh, no creían que hacía magia, ¿eh? Si quieren que baje el autobús, soplen todos.
Toda la gente empezó a soplar y el autobús empezó a bajar.
La gente estaba emocionada y entonces le pidieron otro truco al mago, éste les dijo:
Voy a hacer que a ese viejito que está al fondo con su esposa, se le ponga duro el pene: ¡1, 2, 3! Y
¡¡¡ZASSSSSSS!!!, se le paró el machete al viejito y los pasajeros, al unísono exclamaron:
¡¡¡OHHHHHHHHHHH!!!

Entonces se oyó la voz de la viejita, que gritaba:

¡¡¡AL PRIMERO QUE SOPLE, le parto la madre!!!